La Salamanca es una leyenda de Tinogasta, situada en un lugar mítico con una belleza natural increíble. El recorrido hacia el socavón parte desde el cementerio y dura aproximadamente 45 minutos, pasando por sitios hermosos como las vegas y miradores del Río Abaucán. Al final, se llega a un gran hueco en una barranca de más de tres metros de altura, conocido como La Salamanca.
La leyenda dice que en "La Salamanca de Anillaco," un hombre desea volverse rico y vivir muchos años. Una bruja le dice que debe pedir este don al demonio en la Salamanca de Anillaco. A pesar de sus dudas iniciales, finalmente decide ir. En la Salamanca, la bruja y otros seres le guían en un ritual oscuro y aterrador, lleno de música, danzas y pruebas. Aunque el hombre casi cae bajo el influjo de la magia negra, al final se aferra a un crucifijo y logra escapar. Un lugareño lo encuentra al día siguiente, y el hombre se salva, aunque queda marcado por la experiencia.
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